Hay una cosa que se entiende fácil en cuanto empiezas a cuidar tu negocio como se merece.
Y es que muy poca gente está haciendo las cosas bien de verdad.
MUY POCA GENTE.
Y esto no es otra cosa que ventaja competitiva, para el que está suficientemente despierto como para verla.
El otro día tuve un cafecito virtual con una persona random que conocí en un lugar random. No viene al caso.
La cuestión es que es una tía que emprende, que tiene un negocio desde hace años.
Y me dijo que a ella toda esta gente que va de que facturan 5.000 € no le hacen gracia.
Que ella no se cree que la gente facture eso.
Que son unos vendehumos.
Mira, te juro que me explota la cabeza y me dan ganas de sacudir fuerte a esta persona para que espabile en la vida.
¿Cómo vas a pensar que facturar 5.000 € es de vendehumos?
Te hablo de 5k al mes, eh? no al día, ni a la hora… al mes!!!
Si hay negocios ahí fuera facturando 5k cada vez que tiran de la cadena. ¿Cómo puedes pensar que 5k al mes es de vendehumos?
La palabra vendehumos es sinónimo directo de escasez, pero bueno, esto da para otros 3 correos, por lo menos.
La ventaja aquí es que solamente con ser consciente de que puedes facturar 5, 10, 25 o los que te dé la gana, ya estás por delante de un montón de personitas que piensan como esta mujer.
Que puede que no sepas cómo, ok.
Que puede que necesites aprender algunas cosas, ok.
Pero que poder, puedes.
Por supuesto.
Si casi con cambiar tu pensamiento ya tienes ventaja competitiva con respecto a esta gente, imagina tu ventaja si, además, empiezas a mover el culo
Flipante.
De locos.
A.
Mover.
El.
Culo.
