Ayer te contaba que NO PASA NADA cuando dejas de comunicar en tus redes unas semanas.
Estos parones también me permiten reflexionar sobre lo que quiero compartir.
Y es que me he dado cuenta de que disfruto más hablando de autocuidado, de paz, de paisajes y pajaritos que de marketing.
Estoy tan conectada con el disfrute y la naturaleza que me cuesta volver a lo “terrenal” de conceptos como marketing y ventas.
Sobre todo al exponerme ante personas que no conozco tanto…
Puede que me queden resquicios y todavía tenga asociado el marketing como algo “malo”, “sucio”, “falso”.
(Sí, a mí también me ha pasado, no estás sola).
Puede que como lo tengo tan integrado me parece “de cajón” y no vea necesidad de hablar de ello.
Puede que piense que “ya lo he contado todo”.
En fin, pueden ser muchas cosas.
Me da igual la causa, la cuestión es que al parar, lo detectas y desde ahí puedes corregir, si es necesario.
Porque quiero inspirarte a que lleves una vida feliz, tranquila y respetuosa.
Pero lo que tú quieres ahora mismo es facturar más.
Así que como esto va de ti, se trata de que yo te enseñe a hacerlo.
Porque es así: LA REVOLUCIÓN ES EMOCIONAL (como decía Ire)
Pero requiere acción.
Y no acción al tuntún, sino acción consciente.
Y este es el recordatorio que me llevo de estos días de parón: que la comunicación de mi negocio no va de mi.
Va de ti. 🙂