Resulta que hoy no me apetecía mucho escribir el artículo y he tenido la brillante idea de pedir a chatgpt que lo escriba por mi.
Vaguería pura y dura.
Sí, hay gente que usa la inteligencia artificial para planificar sus contenidos, escribir sus emails, hacer sus textos, sus imágenes… en fin, para todo.
Pero si tienes un poquito de experiencia, en seguida verás que delegar el trabajo no basta.
Y ojo a esto, porque he dicho “delegar”, no la inteligencia artificial.
Necesitas entender lo que estás delegando para que cuando te entreguen el trabajo sepas si está bien o mal y por qué. Da igual que sea un humano, que una máquina, que un mix.
Es una herramienta que puedes usar como apoyo, pero no como sustituto.
Pues bien, te copio un trozo:
Esto ha dicho CHAT GPT:
Fácil. Piensa en lo que te hace vibrar, lo que podrías hacer horas y horas sin darte cuenta del tiempo. Haz una lista. Ahora pregúntate cómo podrías ganar dinero haciendo eso. Sí, es así de simple y complicado a la vez.
No te limites. Prueba cosas nuevas. Experimenta. La claridad viene con la acción. Y, por supuesto, escucha a tu intuición. Si algo te llama, aunque sea un poco, pruébalo. No te quedes con las ganas.
A ver, tiene razón… supongo.
Pero le falta lo que realmente nos impulsa a avanzar es esa chispa personal, ese toque humano que no se puede replicar. Es el entusiasmo, la pasión y la conexión que establecemos con nuestros clientes y seguidores lo que realmente marca la diferencia.
La tecnología puede ser una aliada increíble, pero nunca debemos perder de vista la importancia de nuestro toque personal en lo que hacemos. Ya sea vendiendo un producto, ofreciendo un servicio o simplemente compartiendo nuestra experiencia, lo que verdaderamente llega a la gente es nuestra autenticidad.
Así que, en lugar de delegar completamente en una máquina, usemos estas herramientas como apoyo para potenciar nuestra creatividad y eficiencia. Pero nunca olvidemos que lo que realmente nos hace únicos y valiosos es nuestra humanidad.