Cuando desconectar es la mejor solución
Hace varios findes me fui a Madrid. Tenía la entrada comprada para un concierto desde hace un par de meses.
Si me sigues por Instagram sabrás que salir de mi rutina y de mi isla me gusta más bien poco.
Y en esas fechas, como Pluma (mi perrita) seguía malita, me gusta todavía menos.
El jueves antes del viaje me agobié bastante, no quería ir.
Tenía demasiadas cosas en la cabeza y pensé que ir haría que a la vuelta todo estuviera peor… ya sabes.
Lo que la gente no quiere es volver a pagar un servicio para quedarse en unos meses igual. No quieren pagar para nada. No quieren pagar otra vez, por lo mismo que no les ha funcionado.